Bajos niveles de confianza a lo largo de diferentes sectores de grandes empresas fue lo que reveló una investigación realizada por la Escuela de Administración de la Pontificia Universidad Católica de Chile junto con DataLab, presentados el jueves pasado en el seminario “Confianza al interior de la empresa en Chile: ¿Cómo fortalecerla?”.
En la presentación, encabezada por el académico de la Escuela de Administración y Director de DataLab Carlos Portales junto a Cristóbal Hollstein, parte del equipo investigador, se trató la importancia de desarrollar una cultura de confianza dentro de las organizaciones chilenas. Esto, debido a que se ha demostrado a nivel internacional que mejorarla afecta de manera directa y positiva a los niveles de productividad en todo tipo de industrias.
La falta de confianza a niveles organizacionales desencadena una serie de otras problemáticas ligadas, por ejemplo, a la comunicación, coordinación y liderazgo dentro de una empresa. Esto se conecta directamente con una creciente actitud individualista por parte de la fuerza de trabajo local, que ve cada vez más lejos a las entidades colectivas -como una empresa- como algo lejano y difícil de contextualizar frente a sus tareas diarias, dando lugar a una cultura más centrada en el bienestar individual.
En este índice, que incluyó encuestas a 7.710 personas de diferentes áreas de la industria nacional, considerando dirigentes sindicales, trabajadores, jefaturas intermedias y gerentes, se reveló que la “confiabilidad de otros” no supera el 54% en ningún caso, siendo las gerencias el grupo que menos confía en otras partes de una organización.
¿Qué medidas se pueden tomar para mejorar la confianza dentro de una organización?
Mientras que estos bajos índices de confianza que nos posicionan dentro de los últimos países de la OCDE en la materia hablan mucho sobre la realidad nacional en materia laboral, la verdad es que son muchas las prácticas que las empresas pueden tomar para comenzar a generar mejores ambientes de comunicación y transparencia entre áreas. Durante el seminario se expusieron casos de diversas empresas nacionales como AFP Habitat, AES Gener o Metro De Santiago, que ya han dado algunos de los primeros pasos en establecer normas de fomento de la confianza y colaboración entre diferentes partes de una organización.
Durante la presentación del estudio, Portales destacó la importancia de tres variables vitales a la hora de generar este tipo de instancias en empresas de todo tipo: capacidad, empatía y consistencia, que deberán trabajarse en forma simultánea y que permitirán que la fuerza de trabajo pueda sentir una mayor conexión con sus labores, el contexto en el que se desarrollan y cómo afectan a la empresa. También se discutió sobre la importancia de contar con líderes empáticos en los que la fuerza de trabajo pueda sentirse cercana y comprometida.